Transición de la academia al movimiento moderno, analizando la casa Forner-Bigatti en Buenos Aires, Argentina
Introducción
La arquitectura Argentina siempre ha sido influenciada por el continente europeo, las diversas corrientes de vanguardia que han ido surgiendo como el impresionismo, expresionismo, cubismo, neoplasticismo, entre otras, tienen sus ejemplares en la ciudad de Buenos Aires y el movimiento modernista no sería la excepción.
Después de la crisis de los años 10 y la primera guerra mundial la arquitectura se transforma a priorizar la funcionalidad y la racionalidad. Se proyecta con nuevas técnicas y recursos formales rechazando el ornamento tal como se enseñaba en la academia, impulsando nuevas teorías en la arquitectura.
El objetivo del presente trabajo de investigación es el análisis de la arquitectura moderna de la Argentina, sus antecedentes, características principales y la consecuencias que provocó este movimiento. Como base de este escrito se analizará la obra “La casa Forner-Bigatti” del arquitecto Alejo Martínez del año 1937.
La casa Forner-Bigatti – El Proyecto
En el año de 1937, el matrimonio formado por los artistas plásticos Raquel Forner y Alfredo Bigatti adquirieron un lote en el barrio de San Telmo frente a plaza Coronel Dorrego de casi los 200 m2, encargaron al arquitecto Alejo Martínez el diseño de su vivienda. El proyecto tiene como particularidad una doble altura que vincula los talleres de trabajo de cada uno de los artistas y la relación de estos espacios con las actividades domésticas en una casa habitación.
El arquitecto Alejo Martínez había realizado anteriormente diferentes obras de viviendas unifamiliares algunas de ellas con más de 10 años de antigüedad al proyectar la casa Atelier. Durante los años de 1925 a 1932 realizó diversas obras en la ciudad de Concordia, provincia de Entre Ríos. Sus obras a destacadas se encuentran la casa Péndola Díaz en la calle Güemes, la casa de Bernardino Horne de 1930.
El valor del vacío de la casa Forner-Bigatti
El arquitecto proyecta la vivienda en función a las actividades haciendo protagónica los talleres de los artistas. Aunque para la época no es nuevo tener el taller dentro del domicilio, esta casa tiene en particular de vincular 2 espacios diferentes, un taller de pintura y uno de escultura por medio de una doble altura.
La doble altura sobre el taller de escultura es el factor más importante de la vivienda, respondiendo totalmente a un pensamiento funcional y racional. A diferencia de la teoría del vacío como espacio vinculante en las familias y la creación de espacios públicos dentro del hogar, la casa utiliza este vacío haciendo prioridad la producción artística sobre la actividad doméstica. El vacío resuelve la problemática de medidas para las diferentes obras de gran altura que realiza Bigatti, fusionada con los planos verticales blancos permite al artista tener una mejor concepción del espacio.
La segunda característica importante a resaltar es la continuidad de los espacios. El vacío genera la conexión acústica y visual de ambos talleres haciendo que los artistas puedan comunicarse sin perder su independencia.
La entrada de luz natural se hace protagónica en la obra por medio de los vacíos, el vacío vertical de la fachada ilumina los dos talleres, sin embargo no es lo único, hay vacíos en la losa cubiertos con ladrillos vidriados y vacíos en el balcón sobre el taller de escultura que permiten la entrada de luz directa. Este tipo de intervenciones además de ser diseñadas para cumplir la función son interesantes por que permiten una entrada de luz diferente.
Aunque pareciera que el movimiento de la arquitectura moderna destaca la importancia de la luz está nunca ha sido desvalorizada. La luz en todas las corrientes es lo que define las características principales de cada una de ellas, por ejemplo el impresionismo utiliza la ausencia de luz para generar escenas de angustia.
La asimetría de la forma en la casa Forner-Bigatti
Las plantas se desarrollan formando bloques del ancho del frente hacia al posterior, Dando como resultado 3 bloques. El primer bloque es el público donde se ubican los talleres de escritura, escultura y pintura. El segundo bloque semi público donde se encuentra la escalera principal comedor y cocina, galería y jardín. Y el tercer bloque el dormitorio y servicios.
La zonificación y la división de tareas todo ha sido estudiado para el desarrollo de las funciones rigiendo de nuevo la función sobre la forma. Al igual que el volumen la planta no presenta áreas sin función, lo cuál sería ilogico por la dimensión del terreno.
El vacío es tan importante que presenta el 25% de la planta, se puede observar la continuidad de los bloques y los límites de estos. En planta se puede apreciar que no solamente es en los talleres es donde se da una conexión si no también en las dos terrazas, solo que una es al área pública y la otra al área privada.
Podría pensarse que no hay un orden y la forma de la planta es asimétrica otra característica del movimiento moderno. A diferencia de la academia que preservaba el orden y la simetría, la modernidad tanto en planta como en fachada presenta volumenes asimetrícos y lo que sucede de un lado no va a ser igual que del otro. Sin embargo haciendo un análisis de la formas que construyen la planta resultan ser cuadrados y rectángulos que se van rotando y repitiendo, un valor desatacable de la modernidad: la modularidad. Como en este caso, de tan sólo 3 componentes se ha creado una forma que pareciera compleja pero en realidad no lo es.
Relación bilateral – Forma y función en la casa Forner-Bigatti
Al haber comentado la importancia del vacío y la función en esta obra podría ser sencillo afirmar que la forma es regida por ambas, como es el lema de la modernidad, pero la forma como es el caso de esta obra, es el resultado y trabajo paralelo con la función. La sustracción de lleno en las fachada, para la creación de terrazas, y permitir la entrada de luz natural me parece que es un método funcional, sin embargo la formas de los vacíos también corresponden a lo estético.
De la misma manera que en la planta, la fachada es asimétrica y modular, usando la repetición de las geometrías, en esta se puede observar mejor la relación 2:1 que tienen las formas. La rotación de los rectángulos al eje horizontal dan como resultado que se enfatice el vano vertical.
Además de función existe una intención por parte del movimiento moderno de la conexión del exterior e interior. Esta obra ubicada frente a la plaza Coronel Dorrego tendría una mayor influencia de esto y no podría pasarse desapercibido este punto, para el proyecto es importante la continuidad visual del exterior que tenían los talleres para darles un identidad pública dentro del espacio interior.
La forma se ve intensamente analizada haciendo énfasis en la única columna visible en la vivienda en la galería. Esta columna siendo visible a propósito crea una imagen de racionalidad, el deseo de querer mostrar la función de todos los elementos.
“Ya en la argentina del 30 ningún arquitecto medianamente perspicaz podía negar la existencia de una nueva forma de hacer arquitectura, cuyos resultados eran absolutamente distintos de la que se hacía entonces. En cuanto a su aspecto exterior, era una arquitectura blanca, formalmente sencilla, de una geometría contundente, de volúmenes netos y aristas vivas. Se notaba en ella la ausencia de decoración, es más quienes hacían abjuraban de la decoración.»
Ortiz, Federico, Historia General del Arte en la Argentina, Academia Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, 1999, Tomo Vlll, pg 147.
La simplicidad de la fachada, como en el movimiento moderno y en esta obra, es la evolución de las vanguardias. El ornamento considerando como innecesario no fue propiamente del movimiento moderno, desde el Art Decó la decoración fue siendo menos utilizada, la influencia de la arquitectura estadounidense que es más simple que la europea empieza a ser influyente en la Argentina.
Epílogo
Además de la influencia de los países extranjeros, las teorías, los artículos publicados de reconocidos arquitectos, el principio del sigo XX fue una época de crisis mundial que repercute en el estilo de vida y arquitectura Argentina.
Las consecuencias de esta época es el movimiento moderno desarrollando el funcionalismo o la racionalidad, aprovechando todas las innovaciones del siglo XlX, el movimiento moderno desarrolló la técnica del hormigón armado y se caracterizó por no ocultar la apariencia de los materiales, rechazando la ornamentación aplicada. Utilizando planos limpios, creando espacios continuos y geometrías simples, la arquitectura moderna busca crear espacios sociales incluso dentro de las viviendas.
El movimiento moderno no es el rechazó a lo establecido por las academias, es un estado de consciencia. Se presenta como la búsqueda de solución de problemas de manera rápida y eficaz teniendo en cuenta la falta de recursos. Es importante el movimiento moderno por el impacto social que representa, la arquitectura expone el estado de la sociedad y el rechazo a técnicas de vanguardias anteriores es el modo que los arquitectos demuestran sus disconformidades a fallos que propiciaron la crisis a principios del siglo.
Bibliografía
- Carlos Gustavo Gímenez, Ángel M. Navarro. (Enero 2007). La casa Taller de Forner y Bigatti. Summa+, 172 págs.
- Jorge Sainz, Arquiectura y Urbanismo del siglo XX. Historia del Arte.
Sobre la Autora
Sandra Balderas Rojas: Estudiante de la Universidad Autónoma de Querétaro, cursando la Licenciatura en Arquitectura con línea terminal en diseño interior.
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