A lo largo de las últimas semanas hemos visto cómo cambios profundos y estructurales se han sucedido a lo largo y ancho de todo el planeta. Hemos visto afectadas muchas áreas de nuestra vida, trastocadas nuestras rutinas, proyectos cancelados o aplazados, y muchos nos hemos hecho la pregunta incorrecta: y ahora, ¿qué va a pasar?
El mundo cambia. Siempre está cambiando. Mañana nunca será igual que ayer. 2020 nunca será igual que 2015 y 2015 nunca será igual que 2010. La pregunta no es si el mundo va a cambiar o qué ocurrirá cuando cambie. Esto es un hecho, y continuará ocurriendo a lo largo de los próximos años y décadas y siglos, igual que lo ha venido haciendo hasta ahora.
La pregunta correcta es: ¿cómo vamos a cambiar nosotros para adaptarnos y prosperar en un mundo cambiante?
En este artículo quiero mostrarte una visión sobre lo que este año 2020 puede significar para nosotros, los arquitectos, y 4 claves para sacar lo mejor de este tipo de circunstancias y garantizar nuestro porvenir profesional. Ahora y en el futuro.
Clave 1 — Tomar una firme decisión
En momentos de cambio o de crisis las prioridades se trastocan. Lo que antes era importante ahora se convierte en irrelevante. Lo que antes era accesorio ahora resulta que es esencial. Lo que ahora es urgente antes sólo era importante. Y lo que ayer era inimaginable hoy es una realidad.
Estos momentos de crisis no son el fin de nuestra carrera; en su lugar, son una oportunidad para cambiar con el mundo. Los clientes nos pagan cuando resolvemos sus problemas; ahora más que nunca nuestros clientes tienen problemas.
Es vital no caer en la queja ni consumir excesos de información y pre-ocupación. En lugar de eso, ¡ocupémonos! Exploremos con curiosidad los nuevos retos que necesitan y necesitarán soluciones ahí fuera.
¡El mundo de hoy necesita arquitectos curiosos y creativos!
Ante estos acontecimientos que estamos viviendo, los arquitectos tenemos fundamentalmente dos opciones:
- Permanecer anclados al pasado esperando y esperando a que las cosas “vuelvan a ser normales”, sin replantearnos nuestra estrategia de negocio actual.
- Adaptarnos al cambio inevitable de nuestra sociedad, dirigiéndonos hacia aquellos nuevos espacios en el mercado que más necesitan ser atendidos.
Lo cierto es que el mundo no va a tener una crisis para encajar con nuestras necesidades. Nuevas crisis llegarán, más grandes y complejas, y nosotros siempre tendremos la opción de adaptarnos. Sin lucha, sin apego, sin sufrimiento. Con inteligencia, con curiosidad, con entusiasmo.
Es importante no dramatizar y comprender que las crisis se suceden continuamente en cada sector del mercado, a diario, sin necesidad de una pandemia: un simple cambio estructural en la normativa, la irrupción de una nueva tecnología, la aparición de una nueva metodología, la incursión de un nuevo agente…
El mundo siempre cambia, sólo que cada vez lo hace más rápido. Con él, nuestra profesión de arquitecto también está cambiando y nuevos horizontes de mercado se abren ante nosotros. Surgen nuevos retos que atender en múltiples campos y estos retos son oportunidades para nosotros. Evidentemente el primer paso es elegir la opción B: adaptarnos. Y así tomamos esta firme decisión. Adaptarnos.
Clave 2 — Desapegarnos de nuestra zona de confort
Como hemos visto, el mundo no va a tener una crisis para encajar con nosotros… es hora de salir de nuestra zona de confort. Es el momento de soltar nuestro apego a “hacer X”, soltar nuestro apego a “aquello para lo que nos hemos preparado”, “aquello que nos gusta hacer”, “aquello que hemos venido haciendo todos estos años”… Si estás encontrando dificultades para ejercer como arquitecto en estos momentos es hora de cuestionar tu forma de ejercer, aunque sea un viejo conocido.
Desapegarnos de aquello que hemos venido haciendo no significa cambiar nuestra práctica profesional de arriba abajo. Simplemente tomamos distancia. Tratamos de comprender que si no encajamos con los cambios que están aconteciendo, debe haber opciones que no estamos consiguiendo ver.
Sólo cuando tomamos distancia sobre nuestra práctica profesional podemos transformarnos en observadores, y sólo así podemos descubrir oportunidades en esas nuevas áreas del mercado que surgen en los momentos de cambio. Áreas en las que ofrecer servicios que realmente hagan falta, donde existan personas que verdaderamente nos necesiten.
Ser arquitecto hoy significa ser un profesional que adapta su valioso conocimiento a lo que necesita su sociedad. En un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo, sencillamente no podemos permitirnos el lujo de mantenernos apegados a nuestro pequeño campo de acción. Hoy los arquitectos tenemos importantes desafíos que resolver en las infinitas caras del prisma de nuestra sociedad y podemos estar presentes en infinidad de campos:
— Mobiliario — Iluminación — Acústica — Rehabilitación — Patrimonio — Divulgación — Promoción inmobiliaria — Eventos — Festivales — Conferencias — Ferias —Cine — Teatro — Restauración — Gastronomía — Motion Design — Workspaces — Paisajismo — Arquitectura legal — Equipos de trabajo — Management — Retail — Globalización — Branding — Marketing — Movilidad urbana — Materiales — Empresa — Accesibilidad — Monitorización — Urbanismo — Sostenibilidad — Hospitales — Tecnología — Diseño — Software — Visualización — Realidad Virtual — Reformas — Religión — Dependencia — Relaciones públicas — Política — Tercera edad — Mediciones — Comunicación — Hoteles — Aeroportuario — Economía circular — Zoología — Mascotas — Maternidad — Contabilidad — Residuos — Reciclaje — Automovilística — Alquiler — Compraventa — Diseño gráfico — Ilustración — CAD — BIM — Sociología — Organización — Metodología — Gestión — Estructuras — Energía — Dirección de obra — Inversión — Project Management — Internet of Things (IoT) — Conquista espacial — Sexología — Educación — Banca — Interiorismo — Recursos naturales — Ingenierías — Drones — Observatorios — Sistemas — Elementos constructivos — Funerarias — Minería — Cantería — Escenografía — Auditoría — Alimentación — Administración pública — Big Data — Análisis de datos — Arquitectura de la información — Arte — Exposición — Museos — Co-living — Historia — Fotografía — Set Up — Moda — Psicología — Climas extremos — Online Shopping — Viajes — Turismo — Climatología — Aire — Acondicionamiento — Agricultura — Logística — Territorios insulares — Programación — UX — UI — Impresión 3D — Joyería — Fitness — Wellness — Industria musical — ONGs — Limpieza — Mantenimiento — Comunidades — Comercio minorista — Instalaciones — Ganadería — Espacio público — Infancia — Usos mixtos — Cambio climático — Laboratorios — Inteligencia artificial — Mundo rural — Emergencias — Prefabricación — Sistemas modulares — Género — Energías Renovables — Domótica — Robótica — Automatización — Mapeo — Geolocalización — Trabajo remoto — Higiene — Packaging — Seguridad — Vigilancia — Concursos — Familia — ETC.
Ser arquitecto hoy es algo apasionante. ¡Sobre todo si nos desapegamos!
Clave 3 — Tener el valor de proponer servicios de valor
Cuando hemos tomado la firme decisión de cambiar con el mundo y tomamos distancia sobre “lo que podemos o no podemos hacer” como arquitectos, empiezan a surgir nuevos horizontes de oportunidad para nosotros. Y estos horizontes de oportunidad requieren de arquitectos valientes que aporten soluciones valiosas.
Puede que ese problema que hemos detectado en el mercado (nuestra oportunidad para ofrecer una solución) nos aterrorice. Puede que nunca antes hayamos hecho algo igual. Puede que no tengamos las habilidades para solucionarlo. Puede que no sepamos cómo hacerlo. Puede que pensemos que nadie confiará en nosotros.
¿Cómo crees que los profesionales dan solución a los nuevos problemas que surgen en momentos de cambio? ¿Cómo, si todo es nuevo, se atreven a ofrecer soluciones a problemas que antes no existían?
Arquitecto, ¡el mundo necesita profesionales valientes!
En los momentos de crisis como el que estamos viviendo, nadie ha pasado por aquí antes. Nadie reúne toda la experiencia ni todos los conocimientos para ofrecer soluciones a problemas que hace 3 meses ni existían. Este hecho tienen un hermoso efecto en las relaciones profesionales: en los períodos de crisis, la colaboración es clave. Si has detectado una oportunidad en el mercado pero no sabes cómo desarrollar el servicio que necesitan las personas a las que te vas a dirigir, tengo dos palabras mágicas para ti: pide ayuda.
Hoy el desconocimiento no puede ser un obstáculo. Aquellos arquitectos que potencien las colaboraciones profesionales con otros expertos de diferentes campos tienen enormes ventajas con respecto a los arquitectos que continúan con el mantra individualista. Al colaborar estamos consolidando nuestro expertise y nos aseguramos de ofrecer el servicio más valioso posible a las personas que ahora lo necesitan.
Clave 4 — Abrirnos paso en el ruido del mercado
En los momentos de cambio el nivel de ruido y confusión se agudiza. Se especula con las posibilidades de un futuro incierto, mientras que las necesidades reales de nuestros clientes quedan a la sombra de todo este revuelo. En medio de este caos, muchas veces nuestros clientes no saben ni siquiera que existe una solución a su problema.
Es nuestro deber llegar a estas personas y plantear las estrategias necesarias para comunicarnos de una forma clara y efectiva, abriéndonos paso en el ruido que se produce en estos momentos de incertidumbre con un mensaje directo y accesible.
Estas estrategias deben garantizarnos un contacto continuo con clientes potenciales, que nos permita cerrar reuniones semanales y transformar así un porcentaje de ellos en clientes reales que nos contraten al mes. Sólo cuando hemos cerrado de 1 a 3 clientes, podemos decir que hemos encontrado nuestro nuevo espacio en el mercado.
Debemos comprender que en las crisis los clientes no desaparecen. En las crisis lo único que desaparece es la prioridad de nuestro servicio. Recuerda que en este tipo de circunstancias todo se trastoca, y si no trastocamos nuestras estrategias experimentaremos las devastadoras consecuencias de la inmovilidad. Muévete con el mercado y encuentra a tus clientes: te están esperando.
Sobre la autora: Caterina de la Portilla
Desde 2009 Caterina ha dedicado 10 años a su formación y ejercicio como arquitecta en España y EEUU. Actualmente también trabaja como mentora con otros arquitectos enseñándoles las claves para ejercer como independientes de forma libre, estable y próspera. Puedes encontrarla en su web o en su perfil de LinkedIn.
Como Arquitecto estoy adaptándose a las nuevas necesidades del mercado. Anteriormente subcontrataba servicios actualmente tratamos de cubrir todo. No fabricaba, compraba ya fabricado ahora trabajo más estrechamente con los clientes que inician a cotizar, tratando de satisfacer sus necesidades con precios más bajos. Espero poder adaptarme al nuevo ritmo y ser más competitivo.
Seguro que lo consigues Alfredo… al menos ya has dado los primeros pasos. Un saludo