Acogedora, entregada y protagonista así es la vivienda que os presentamos hoy, todo un alarde de pureza, donde los espacios dialogan entre sí. Una casa de estilo natural que la diseñadora Anne Sage ha implementado en la casa de la blogger Kim de Eat, Sleep, Wear, en California. La luz se cuela en los interiores y nos invita a quedarnos.
El verdadero valor del proyecto yace en el cuidado detalle de cada elemento que lo compone. Las juntas, encuentros, aplacados y bisagras encajan a la perfección en un baile de madera y escala de blancos. La materialidad de los elementos define la experiencia del usuario y vela por su comodidad. Las madera en sus diferentes texturas y colores, combinan con los planos opacos de los elementos de decoración resaltados en acentos de color negro intenso, y algunos metales que van salpicando la vivienda a través de complementos y elementos decorativos, creando una escena personal y cuidada. De esta forma, la casa resulta especialmente equilibrada, serena y armónica.
La estancia principal de la casa presume de luz y amplitud, donde la decoración con piezas más clásicas renovadas y alguna más moderna de diseño conviven perfectamente. El espacio se envuelve de blanco en paredes y techos, como si de un lienzo se tratara. Un lugar donde exhibir las piezas de arte y mobiliario. Formas, colores y toques Mid-Century salpican este selecto espacio de cuidado diseño.
Las obras de arte crean un equilibrio entre la luz y la oscuridad, el espacio negativo y el espacio positivo. Este sentido del peso visual es definitivamente uno de los focos de atención de la vivienda. Una continuidad de piezas que crean una mezcla ecléctica pero cohesiva que completa el diseño a la perfección.
Una amplia mesa preside la estancia donde el mobiliario seleccionado de piezas vintage añade un punto de sofisticación. Sobre ella cuelga del techo de diseño. La paleta de colores se atreve con tintes intensos que aportan profundidad, combinados con acabados más suaves y claros para conseguir un discurso a la vez sobrio y relajado.
Cada espacio es una nueva oportunidad de intervención, y la diseñadora presto especial atención a todos los rincones, sacando el máximo partido de la arquitectura existente. Sin excesos. La intervención en el dormitorio consigue crear una atmósfera de recogimiento en esta zona central de la casa, con acabados cálidos y domésticos, en madera y tonos suaves.
El resultado es una composición de escenas y atmósferas donde disfrutar de una nueva cotidianidad, en la que la fluidez y el contraste marcan el ritmo.
Sobre la autora:
Teresa Cobos es arquitecta de profesión, interiorista de vocación y amante de la decoración. Eterna viajera y apasionada de la literatura. Defensora de los espacios creados para vivirse.
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